¿Qué es?
La fototerapia consiste en el tratamiento de diferentes enfermedades de la piel mediante la radiación ultravioleta, que tiene principalmente una acción antiinflamatoria.
¿Cómo se aplica?
La fototerapia se utiliza en diferentes enfermedades dermatológicas inflamatorias (psoriasis, dermatitis atópica, vitíligo, entre otros) y neoplásicas (micosis fungoide). Generalmente está indicada en formas extensas en las cuales la aplicación de un tratamiento tópico es insuficiente.
¿Cómo se administra?
Existen diferentes tipos de radiación terapéutica. Radiación UVA y UVB de banda estrecha. El UVA es una radiación que llega más profundamente pero de una forma menos potente, razón por la cual necesita de un medicamento fotosensibilizante (es decir, que potencie el efecto de la radiación UVA): el psoraleno (Psoraleno+UVA=PUVA). En el caso de enfermedades de piel extensas, el psoraleno se administra en pastillas (según el peso), 2 horas antes de hacer la sesión, mientras que en erupciones localizadas (manso y pies) se administra en crema (o baño), unos 15 minutos antes.
El UVB es una radiación más superficial pero suficientemente potente para no necesitar de ningún fármaco acompañante. Según el tipo de enfermedad, el tipo de lesiones y las características de cada paciente se escogerá un tratamiento u otro. La dosis de radiación por sesión también depende del tipo de piel de cada paciente. Generalmente se administran 2-3 sesiones a la semana hasta unas 20 sesiones. Ocasionalmente, se puede combinar con otros tratamientos tópicos o sistémicos para aumentar la efectividad.
Efectos secundarios
Los efectos secundarios son similares a los producidos por el sol. Ocasionalmente puede aparecer enrojecimiento de la piel con quemazón, más o menos intensa, hecho que obliga a personalizar la pauta. También suele desarrollarse una pigmentación cutánea similar al bronceado de verano y, a veces, sequedad cutánea, hecho que obliga a utilizar cremas hidratantes. A largo plazo, puede desarrollarse un mayor fotoenvejecimiento cutáneo (arrugas, manchas) y, en algunos casos con muchos ciclos de tratamiento acumulado, puede existir el riesgo de aparición de un cáncer de piel.
Precuaciones
Durante el tratamiento, se deben proteger los ojos y la zona genital (en los hombres). En el caso del tratamiento con PUVA, tras la sesión y durante el resto del día (8-12h siguientes) ha de evitarse la exposición al sol natural o artificial y protegerse los ojos con gafas de sol.